Si alguna vez se ha preguntado por qué sus balanceos en el golf, u otros movimientos del cuerpo de "alta precisión", bien ensayados, no le salen iguales cada vez que los realiza, después de años de práctica, ahora existe una respuesta: depende fundamentalmente de su cabeza.
(NC&T)Ése es el hallazgo de una nueva investigación desarrollada por ingenieros eléctricos de la Universidad de Stanford. "La razón principal de que usted no pueda moverse de la misma manera, como al dar un golpe de precisión con un palo de golf, es que su cerebro no puede planear el movimiento de la misma forma cada vez", explica el profesor de ingeniería eléctrica Krishna Shenoy, cuya investigación incluye el estudio de la base neuronal de la integración sensorial-motora y el control del movimiento. Él, Mark Churchland y Afsheen Afshar, son los autores del estudio. Es como si en cada ocasión en la que el cerebro intentara resolver el problema de planear cómo moverse, lo hiciera todo nuevamente. La práctica y el entrenamiento ayudan al cerebro a resolver el problema con mayor habilidad, pero las personas y otros primates no estamos "cableados" para poseer tal grado de consistencia, a diferencia de los ordenadores y otras máquinas que sí lo están. En cambio, las personas parecemos ser improvisadoras por defecto. De hecho, una conclusión principal del estudio es que la variabilidad de los movimientos no es un fenómeno fundamentalmente mecánico como se había pensado. Después de estudiar las actividades neuronales y musculares, los investigadores de Stanford han concluido que menos de la mitad de la razón para la inconsistencia de los movimientos depende de los músculos. Para los atletas, la incapacidad de reproducir los movimientos de forma perfecta parece ser un problema frustrante que necesita ser resuelto. Pero los investigadores especulan con que el cerebro ha evolucionado hacia su estilo actual de improvisación, al parecer, precisamente, porque la inmensa mayoría de las situaciones requieren movimientos significativamente nuevos. Los depredadores nunca tienen oportunidad de capturar y matar sus presas exactamente de la misma forma y exactamente en las mismas condiciones. El sistema nervioso no fue "diseñado" para hacer la misma cosa una y otra vez. Fue diseñado para ser flexible. Lo típico es que necesitemos hacer movimientos distintos para amoldarnos a cada situación, espacio u objeto a manipular.  | | (Krishna V. Shenoy.) (Foto: Krishna V. Shenoy) | |
---|
El valor de la práctica y el entrenamiento está en que pueden reducir la variación en lo que se refiere a las habilidades mentales, pero no cambian la manera inconstante en que la mente planea el movimiento. Una analogía podría ser solucionar problemas de matemáticas. Alguien que ha estudiado, encontrará más fácil resolver un nuevo problema que alguien que no se ha preparado. Dada la naturaleza endémica de la variabilidad de los movimientos, la investigación no señala ningún medio definitivo para combatir el "problema". Los autores de este estudio no ofrecen ningún consejo nuevo para los deportistas. |
|