El logro técnico, efectuado en la Universidad de Toronto, representa la primera vez que uno de los dispositivos denominados semiconductores "mojados" ha superado a los semiconductores tradicionales fabricados por el proceso de crecimiento del cristal, más costosos.
La forma habitual de hacer los chips de ordenador, los láseres para fibras ópticas, los sensores de imágenes para las cámaras digitales, en definitiva los ladrillos básicos de la era de la información, resulta costosa en tiempo, en dinero y en energía. Los semiconductores convencionales han producido resultados espectaculares: el ordenador personal, Internet, la fotografía digital... Pero se basan en el crecimiento de cristales atómicamente perfectos a temperaturas de mil grados Celsius y superiores.
El equipo de Toronto, en cambio, "cocinó" las partículas de semiconductor en un matraz que contenía ácido oleico extrapuro, el ingrediente principal del aceite de oliva. Las partículas son sólo de unos pocos nanómetros. El equipo puso entonces una gota de la solución en una lámina de vidrio con electrodos de oro estampados, y forzó a la gota a extenderse en una película semiconductora lisa y continua. Entonces dieron un baño de dos horas en metanol a la película. Una vez que el disolvente se evaporó, dejó una capa de 800 nanómetros de espesor de nanopartículas sensibles a la luz.
A temperatura ambiente, los fotodetectores pintados fueron diez veces más sensibles a los rayos infrarrojos que los sensores que se usan actualmente en los aparatos militares para visión nocturna y en imaginología biomédica. Ahora resulta claro que la electrónica procesada en soluciones puede combinar un funcionamiento excelente con un bajo costo.
El avance tecnológico obtenido en la Universidad de Toronto podría ser de extrema importancia tanto para la investigación como para la industria. Por ejemplo, la habilidad de fabricar semiconductores económicos y de alto rendimiento, para su uso como emisores y detectores infrarrojos, resulta de un valor enorme en una gama amplia de sistemas de comunicación, de imagen, y para aplicaciones de monitorización.
Con este hallazgo, ahora ya está demostrado que la fabricación química húmeda de chips es simple, conveniente y barata, y que además puede producir dispositivos con rendimiento superior al de los convencionales fabricados mediante el crecimiento de cristales. |
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